¿Qué hacéis cuando tenéis algo de tiempo libre? Esto es muchas veces lo que más deseamos en el mundo, poder descansar de nuestras obligaciones y poder disfrutar de algo de tiempo para nosotros y nosotras mismas, para descansar y reponernos de todo el desgaste que nos ha supuesto el día a día en el trabajo o con las obligaciones de nuestra familia. Tenemos muchas maneras de disfrutar de esos momentos de ocio y la verdad es que lo importante no va más allá de sentir que mentalmente nos hemos repuesto de todas esas cargas que estábamos asumiendo y que nos generaban algo de estrés o ansiedad.
En una información que publicó el portal web del Heraldo se informaba de cuáles eran las actividades de ocio preferidas por los españoles, que son las que os vamos a desgranar a continuación.
- Dar un paseo. Esto es especialmente habitual en momentos en los que el tiempo acompaña y cuando no hay temperaturas extremas en la calle, aunque sí que es cierto que hay gente de todo tipo y a la que no le afecta tanto el tiempo para salir a practicarlo.
- Ver la televisión. Es un clásico y nunca va a dejar de serlo porque es la fórmula preferida de entretenimiento para una enorme cantidad de gente que ha crecido y ha vivido con ella.
- Escuchar música. Ni que decir tiene que es una de las preferencias de la gente para desconectar de la rutina y tener la posibilidad de evadirse, mejorando con ello su bienestar.
- Leer. Aunque haya quien diga que ha pasado de moda en detrimento de los formatos audiovisuales, lo cierto es que sigue siendo una de las grandes preferencias de un público muy diverso.
¿Y cuánto tiempo de ocio tienen los españoles? Esa es otra de las grandes preguntas que debemos hacernos para comprender cuáles son las actividades que más nos gusta desempeñar. La respuesta a esa pregunta depende de varios factores, como se encarga de transmitirnos la noticia que vamos a enlazar a continuación y que procede de la página web de la agencia de noticias Europa Press. Uno de los factores que resulta relevante en este sentido es el tamaño de la ciudad en la que vivamos. Como podéis ver, el tiempo de ocio en una ciudad grande se va reduciendo y ese tiempo de ocio aumenta a medida que la localidad en la que vivimos va siendo más pequeña.
Con independencia de cuánto tiempo libre tengamos y del pueblo o ciudad en la que vivamos, hay una actividad que no hemos mencionado más arriba y que forma parte de nuestra vida: ir al bar de confianza. Los españoles destacamos en buena medida por nuestro carácter alegre y festivo, así que a nadie puede extrañarle que nos guste pasar tiempo en un lugar en el que podamos estar en un ambiente relajado con las personas de nuestra confianza y consumiendo algunos de los productos que más nos gustan, ya sea en lo que respecta a la comida o a la bebida. Por eso hay tantos bares y restaurantes repartidos por toda la geografía española.
Hablar de ocio en España es hacerlo de los bares, nada ni nadie lo puede negar en absoluto. Es el lugar en el que nos podemos olvidar de todos los problemas que ha traído consigo el día y de las preocupaciones que quizá tengamos que asumir al día siguiente. Es el sitio en el que nos sentimos como en casa, en el que podemos hablar sin miedo de prácticamente cualquier cosa y en el que podemos entablar también nuevas amistades. Como veis, esto se encuentra muy de acuerdo con nuestro carácter y ese es el motivo por el que en España hay una preponderancia muy grande de bares y restaurantes… hasta tal punto de que no paramos de batir récords en lo que tiene que ver con el número total de los que disponemos.
Pero hay muchas cosas que nos tienen que convencer de un bar para que acudamos a él de manera continua. Es cierto que lo principal son las amistades, la calidad de los productos, la variedad de las bebidas… pero hay muchas más cosas que se deben tener en cuenta. Una de las cosas de las que la gente no se olvida en estos casos es de la decoración del local, tal y como nos han indicado desde Bayeltecnics, un estudio de interiorismo que no solo se limita a los locales comerciales, sino que también tiene experiencia en el diseño de espacios interiores de viviendas. Y no es de extrañar que así sea. En un mundo en el que la imagen es lo que más cuenta, el diseño de un espacio interior gana muchísimos puntos porque puede atraer a un montón de gente.
Y es que a todos nos importa que el sitio al que solamos ir a tomar algo sea estéticamente bonito. Siempre nos sentimos mejor en un lugar en el que tengamos la sensación de estar a gusto y, como es lógico, todos y todas vamos a estar mejor en un lugar que tenga una estética concreta, una temática que nos haga sentir que estamos en un sitio en el que nos van a servir productos de calidad y en el que vamos a ser tratados como si fuéramos unos verdaderos marqueses. Eso es lo que de verdad importa, pero es evidente que debemos tener en cuenta la envoltura.
Bares de toda la vida o franquicias internacionales: todo nos gusta
Otra de las cosas positivas que tenemos en España en relación con la hostelería es que nos gusta todo tipo de restauración. Nos encanta acudir a bares de toda la vida, donde en muchas ocasiones el propio dueño es amigo nuestro y podemos encontrar en él al mejor aliado para compartir una buena conversación. Pero no cabe la menor duda de que tampoco le hacemos ascos a acudir al local comercial de una franquicia si los productos que nos puede proporcionar son de nuestro interés, o si el local tiene una decoración y una distribución de espacios que nos resulta llamativa. Esto suele pasar y la verdad es que todos hemos sido objeto alguna vez de una atracción como esta.
De hecho, solo hace falta darse una vuelta por la localidad o ciudad en la que vivamos para darnos cuenta de que nos gustan los dos modelos de negocio. Con independencia de que vivamos en un pueblo pequeño o en una gran ciudad, vamos a encontrar bares de toda la vida que cuentan con décadas de existencia y que mantienen el espíritu de lo tradicional, que es algo que a mucha gente le apasiona y que valora mucho a la hora de salir de casa a comer o a cenar. Sin embargo, y especialmente si vivís en una ciudad, habréis podido comprobar que las franquicias cada vez están más presentes en nuestras calles. Eso no es fruto de la casualidad. Son negocios que rentan. Y por eso se sitúan donde se sitúan.
Lo importante es que esas horas libres que nos proporciona el día o el fin de semana sean aprovechadas al máximo. Y una de las cosas que más nos puede ayudar en este sentido es, sin duda, acudir a un bar o restaurante. Si no existieran, habría que inventarlos. Está claro que cada uno puede hacer lo que quiera con su tiempo libre y que quizá haya muchas personas que sigan prefiriendo quedarse en casa en esos momentos porque suponga un ahorro de dinero o por simple pereza, pero tener la posibilidad de ir a un sitio en el que puedas socializar mientras tomas algo con gente de confianza es algo que siempre va a ser interesante y que tiene una capacidad más grande de hacernos desconectar, como decíamos más arriba.
No tiene pinta de que, al menos en España, vayamos a prescindir de los bares. Ni tampoco de que simplemente vaya a bajar la afluencia de la gente a este tipo de locales. La pandemia, que fue una situación muy complicada para un sector como del que estamos hablando, ha cambiado mucho la mentalidad de la gente y ha hecho que las personas hayamos asumido que hay que vivir la vida y que una de las mejores maneras que tenemos de hacerlo es saliendo cuando tengamos la más mínima oportunidad para tomar algo con las personas de nuestra confianza.
Es hora de que disfrutemos de la vida. Hay muchas cosas que nos pueden complicar la existencia, nadie lo duda, y por eso tenemos que hacer todo lo que sea posible para intentar disfrutar de cada ocasión en la que esos problemas nos dejen en paz. Los recuerdos que eso nos va a dejar en la memoria son espectaculares y son los que nos van a dar la gasolina necesaria para seguir viviendo y, lo que es más importante, para ser felices. No hay nada en la vida que merezca más la pena que eso. Os lo podemos asegurar.