Somos una familia muy implicada en el compromiso con la conservación del medio ambiente y con la vida sana, nos gusta dedicar los fines de semana a conocer y disfrutar de esos hermosos paisajes y enclaves tan singulares que nuestra península y nuestro país nos puede ofrecer. Y así junto a nuestros hijos y unos amigos decidimos ir a conocer una zona conocida como la ruta de los pueblos de la Arquitectura Negra. Y ahí fue como descubrí una empresa denominada Pizarras y derivados, una empresa familiar que desde hace más de tres generaciones se dedica a la extracción y elaboración de pizarra, así como a su comercialización mediante una amplia gama de productos para tejados, suelos, aplicaciones al aire libre.
La pizarra es un elemento natural presente en los ecosistemas de la Tierra, es una roca metamórfica homogénea de grano fino formada por la compactación, de un color generalmente azul grisáceo, con una estructura en forma de láminas o lajas, muy impermeable lo que la hace que desde tiempos inmemorables se haya utilizado en la construcción de edificaciones, tanto en su edificación como en la cubrición de cubiertas. La pizarra por sus características está considerada como un valor seguro porque a sus cualidades indiscutibles de resistencia, inalterabilidad, belleza, elegancia, une la longevidad y ser el producto más sostenible para la construcción de cubiertas, por lo que el sector de pizarra ha sido el primero en España en obtener la declaración ambiental de producto a nivel nacional, por lo que arquitectos, aparejadores, constructores, diseñadores, artesanos, decoradores, etc. no dudan en incluirla en sus proyectos y realizaciones.
Visitar esta zona conocida como la ruta de los pueblos de la Arquitectura Negra es olvidarnos de la civilización actual de las grandes ciudades, del ruido y atascos, y penetrar en un mundo tranquilo y relajado, con impresionantes rutas de senderismo que discurren a través de lugares tan bellos y singulares como son sus pueblos, o con vistas panorámicas sobre el pantano del Vado o hacia el imponente Pico Ocejón, que con sus 2.048 metros de altitud domina y controla toda la comarca. Esta zona se halla enclavada en el Parque Natural de la Sierra Norte, las tierras altas del noroeste de la provincia de Guadalajara, entre las vertientes meridionales de Somosierra y de la Sierra de Ayllón, encontrándose actualmente en periodo de declaración por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad, por su sobresaliente y admirable valor etnográfico, arquitectónico y paisajístico.
¿Por qué se conoce esta zona como Arquitectura Negra?
Por su característica arquitectura popular, porque las construcciones tanto para viviendas como cerramientos, construcciones de uso ganadero o agrícola, puentes, caminos, etc., utilizan todas ellas la pizarra como principal y casi único elemento, con sus tonos grises, negruzcos, azulados… Un material abundante en esta zona en la que antiguamente no se disponía de otros materiales alternativos.
¿Qué podemos visitar al recorriendo esta zona?
- Las ruinas del monasterio cisterciense de Bonaval, del siglo XII, concretamente fue fundado en el año 1164.
- Palacio de los Duques de Medinaceli o Palacio Ducal de Cogolludo, de estilo renacentista, mandado construir por el I Duque de Medinaceli aproximadamente entre 1488 y1489, su construcción finalizó en 1492. Actualmente es propiedad del Ministerio de Cultura.
- Plaza mayor de Cogolludo. Una plaza porticada rodeada de edificios emblemáticos e importantes como el Palacio Ducal o el Ayuntamiento, un edificio civil excelente del siglo XVIII.
- Palacio de los Mendoza en Tamajón. De estilo plateresco fue mandado construirá mediados del siglo XVI por María de Mendoza y de la Cerda. Actualmente es el edificio oficial del Ayuntamiento de la localidad.
- La ciudad encantada de Tamajón. Una formación natural rocosa, esculpida con el paso del tiempo por la acción del viento y el agua.
- Iglesia de Campillejo. Uno de los edificios más singulares, construido íntegramente con pizarra.
- Iglesia de la Asunción, en Almiruete, de estilo románico, de finales del siglo XII.
Otros enclaves turísticos de Guadalajara
Además de los lugares que os hemos mencionado anteriormente, la provincia castellano manchega de Guadalajara esconde otros muchos enclaves culturales por los que nos podemos perder para disfrutar de su singular belleza como el Palacio del infantado, el Torréon del Alamín o la Capilla de Luis de Lucena y es que en estos lugares podremos trasladarnos a épocas pasadas para aprender algo más de la historia de nuestro país y de esta provincia en concreto.
