El calabacín pertenece a la misma familia de la calabaza y se cultivó por primera vez hace unos 10.000 años.
Es realmente popular en todo el mundo, ya que se producen al año más de 5.000 toneladas de este producto. Los lugares donde más se consume son China y Estados Unidos.
Es una de las hortalizas con menor contenido calórico por lo que es idónea para las personas que quieren perder peso. Además, aporta nutrientes esenciales como potasio, manganeso y antioxidantes.
Está compuesta en un 95% por agua, así que opta por ella para mantenerte hidratado, sobre todo en verano. Con esta hortaliza puedes preparar ensaladas, tortillas, cremas y bizcochos.
Las maneras más saludables de tomarlo son al vapor, salteado o hervido. Es fundamental que esté fresco y, por supuesto, que esté muy bien lavado. También se puede tomar como guarnición de carnes, pastas y pescados.
Si no sabes qué recetas divertidas hacer con esta hortaliza, te aconsejamos que busques en un libro de cocina. Prepara platos deliciosos, como canelones de verduras o espaguetis de calabacín con tomate.
«Podemos combinar el calabacín con otros alimentos. Por ejemplo, con algo de queso fresco y con pavo. Para ponerlo en el pan, lavaremos el calabacín y lo cortaremos a rodajas. Pero podemos hacer las formas que uno quiera. Lo podemos comer crudo o bien, colocar estas rodajas sobre la plancha con un poco aceite y sal. Así estará más tierno y jugoso para nuestro bocadillo especial», explican desde el periódico digital Okdiario.
También puedes preparar el calabacín en la barbacoa con un poco de aceite y una pizca de sal. No puedes poner los calabacines encima de la parrilla directamente, lo mejor es envolverlos dentro de un papel aluminio en el que habremos puesto un poco de aceite.
Este producto destaca por su calcio, hierro, riboflavina, vitamina E, ácido pantoténico, colina, zinc y selenio.
Los calabacines se cultivan en los huertos de la zona mediterránea, donde se siembra directamente en la tierra a principio de la primavera.
Se encuentran disponibles todo el año en los supermercados, pero su mejor época de consumo y recolección es de noviembre a agosto.
El calabacín es bastante sensible al frío y hay que protegerlo con algún plástico. Si llevas una dieta baja en carbohidratos opta por esta hortaliza.
Tiene una puntuación muy baja en el índice glucémico y proporciona un alto porcentaje de agua. Tanto las variantes amarillas como las verdes de esta hortaliza contienen luteína, Beta caroteno, la zeaxantina y el ácido dehidroascórbico.
Los nutricionistas aconsejan combinar este alimento con carnes magras y carbohidratos.
Muchas personas deciden crear un huerto urbano en el jardín para preparar recetas saludables como una ensalada o pasta con vegetales.
Los expertos en horticultura de la empresa wholegreen nos explican los beneficios del calabacín:
Fuente de antioxidantes y vitamina C
Los calabacines contienen muchos tipos de fitonutrientes que pueden ayudar a combatir la inflamación y el estrés oxidativo.
Estos antioxidantes incluyen la vitamina C y la vitamina A. Pero están en la piel del calabacín, así que lávalo para quitarle toda la tierra que pudiera tener, y cocínalo con su piel.
Propiedades antiinflamatorias
Varios estudios han comprobado que esta hortaliza tiene propiedades antiinflamatorias que pueden mejorar la salud del corazón.
Es bajo en calorías
Es saciante, tiene un alto contenido de agua y es bajo en calorías. Incluir verduras sin almidón en la dieta es una opción ideal para reducir la ingesta de calorías.
Además, es una de las verduras con menor porcentaje de carbohidratos, por lo que es aconsejable para los que tienen sobrepeso.
Contribuye a la digestión
Es un alimento fácil de digerir y reduce ciertas alteraciones digestivas, como la diverticulitis. Es hidratante y resulta adecuado en caso de problemas digestivos y estreñimiento.
El calabacín realiza una acción antiinflamatoria dentro del tracto gastrointestinal, lo que impide o retrasa el «síndrome del intestino irritable».
Mejora el sistema inmune
Es un alimento que ayuda a fortalecer el sistema inmune, gracias a la vitamina B1, la B2, la B3 y también la B6.
Evita la anemia
Las embarazadas también pueden tomar este alimento, ya que evita que la gestante sufra anemia. Gracias a la vitamina C favorece lo que es la absorción del hierro.
Variedades del calabacín
A continuación, te explicamos que existen distintas variedades de calabacín:
–El oscuro. Puede ser negro, llamándose samara, o verde.
-El claro. Puede ser de dos clases: el que tiene un color verde muy claro, y el que es verde claro con puntos grises.
–El minicalabacín. Destaca por su pequeño tamaño.
–El pepo. Tiene un color anaranjado,
una forma esférica y destaca por su sabor dulce.
Valor nutricional por cada 100 gramos de calabacín
Calorías: 14 Kcal
Carbohidratos totales: 2,2 g
Fibra: 0,5 g
Sodio: 1
Vitamina C: 22 g
Vitamina A: 4,5 g